Una neoyorquina es la primera mujer posiblemente curada de VIH gracias a un trasplante de células madre de cordón umbilical resistentes a ese virus, que se combinaron con otras de un pariente cercano para aumentar las posibilidades de éxito.
La denominada paciente de Nueva York padecía además un tipo de leucemina, lo que hacía necesario un trasplante de médula, y lleva sin virus desde 2017, periodo que, por otros casos similares, se estima razonable para considerar que puede estar curada.
Este caso se dio a conocer hace un año en un congreso médico, pero hasta ahora no se habían publicado los resultados en ninguna revista científica, cosa que hace hoy en Cell el equipo, encabezado por la Universidad de California (UCLA) y la Johns Hopkins.